El nuevo edificio del Diputación Provincial de Málaga, situado en el Paseo Marítimo de Poniente, ocupa una superficie construida de 42.748,32 metros cuadrados, justificándose su construcción por la dispersión de servicios de este ente en toda la ciudad hasta la inauguración de este edificio. Las obras han sido llevadas a cabo por la fusión de dos empresas como Constructora Sando (Sánchez Domínguez, S.A.) y Constructora San José S.A. El complejo está compuesto por dos grandes módulos que determinan una “L” en planta, donde el sector político-administrativo discurre paralelo a la costa, y lo ocupan los servicios de Diputación; el otro sigue la línea perpendicular al mar, junto con una zona de aparcamiento que ocupa más de 1.100 metros cuadrados.

La estructura del edificio político-administrativo se organiza en:

– Planta baja: salón de usos múltiples para 468 espectadores, vestíbulos, sala de espera y servicios complementarios como control de accesos, escaleras y ascensores.

– Planta primera: Secretaría General, Intervención, Tesorería, Asesorías de Presidencia y servicios complementarios.

– Planta segunda: servicios que integran la Presidencia de la Diputación, con el salón de plenos, la propia Presidencia y grupos políticos.

El bloque político-administrativo se une al edificio técnico por dos grandes “cajas” con una longitud de 230 metros y dos plantas distribuidas en sótano y en planta baja por medio de un pasaje en el que se podrán encontrar el registro, un espacio para exposiciones y las dependencias para el Boletín Oficial de la Provincia.

Al exterior, ambos edificios están protegidos por una malla de acero inoxidable, cuyo objetivo fundamental es ofrecer seguridad y tamizar la luz a unos edificios completamente acristalados.

La Diputación de Málaga era propietaria del Centro Cívico y de los edificios anejos, parcela con una extensión de 58.229,37 metros cuadrados junto a las playas de la Misericordia.

El terreno sobre el que se asienta el Centro Cívico es prácticamente una manzana completa, aunque ha perdido su fachada al Camino de la Térmica al haber cedido parte de las instalaciones para un instituto de enseñanza secundaria; así el terreno tiene como linderos al Sur el Paseo Marítimo, al Este la avenida de los Guindos y al Oeste la calle Almonte.

El Proyecto realizado por el arquitecto Luis Machuca Santacruz parte de un anteproyecto presentado públicamente el sábado 29 de junio de 2002, y en el que el arquitecto ha trabajado durante cuatro años junto con otros tres arquitectos. Expondremos aquí la visión del propio arquitecto a la hora del desarrollo de este proyecto que aspira a que el edificio sea “la continuación del espacio público pero en el interior. Eso es lo que he querido conseguir y creo que lo he hecho. La obra es un conjunto de piezas que tienen cierta vitalidad”. En su diseño apuesta por un edificio singular, pero que funcione bien, con la mirada puesta en la modernidad, “un palacio moderno y emblemático”.

El nuevo edificio se planteó como solución horizontal permeable a su entorno y que sirviera para poner en valor el edificio histórico. Como hemos indicado, se descompone en dos elementos, uno destinado a la Diputación propiamente dicha, y otro lineal perpendicular a la costa, ambos unificados mediante un pasaje. El diseño de este espacio lineal que comunica los dos edificios tiene como principal misión la de poder centralizar los accesos especialmente de mercancías que deben ser escaneadas.

Una de las soluciones más destacadas de este edificio se basa en el uso de los soportales de los módulos administrativos y técnicos como elementos permeables a la zona verde: zona exenta de pilares que se transforma en paseo con cubierta de chapa microperforada, apoyada sobre las piezas lineales del edificio, creando una zona de luz tamizada flanqueada por corredores verdes. Esta zona de semi-penumbra permite que las dos piezas lineales del edificio se cierren con un muro acristalado.

Una de las características más actuales de la arquitectura es la consideración del espesor del cerramiento exterior de los edificios. Si el Movimiento Moderno llegó a la aplicación estricta de unos espesores mínimos como avance tecnológico, el tiempo nos ha hecho comprobar que es necesario dotar de habilidades a esos cerramientos para conseguir una mejora de la exposición solar o mejorar y facilitar su mantenimiento, y eso solo se consigue aumentando su espesor. La diferencia es que se trata de un espesor espacial no de masa construida; el cerramiento ha aumentado su espesor gracias al aumento del espacio propio, lo que permite una mejora hacia la abstracción del edificio ya que el plano del hueco, el plano de la formalización de la imagen ya no es el de fachada. En este caso el conjunto se resuelve con una doble piel de malla metálica apoyada en los vuelos de los forjados frente a la fachada interior donde se encuentran los huecos de accesos y ventana.

La continuidad del borde marítimo de la ciudad de Málaga se ha visto truncada históricamente por el puerto, sin que hasta la fecha haya conseguido el objetivo de integrar en ella su frente. El paseo Antonio Banderas ha supuesto la conquista del sector Oeste, construyendo el llamado paseo de Poniente y tensando los dos extremos a falta del elemento central que ha de convertirse en acceso principal a una ciudad de inevitable vocación marítima.

La administración está asumiendo esta misión combinando la implantación residencial con usos públicos evitando la construcción de una ciudad zonificada, ofreciendo un modelo plural y mucho más realista cara a ser asumido en un breve periodo de tiempo. El uso constante de este paseo es buena muestra de ello a pesar de una escala nada atomizada. El caso del edificio de la Nueva Sede de la Diputación, planteada como ampliación de la anterior sede, pero con una clara vinculación a la actuación más importante de la última década, sin contar la aún inconclusa actuación del Puerto, es un claro ejemplo que podemos calificar como una de las actuaciones de referencia de la Málaga del nuevo milenio.

Debemos apuntar que este nuevo edificio ha levantado una gran polémica sobre sus criterios constructivos en base a los nuevos postulados de la arquitectura bioclimática y construcciones sostenibles. Aunque aspiraba a ser un edificio basado en la sostenibilidad y el ahorro energético, las críticas sobre su viabilidad ecológica se han abierto en prensa. Se considera un edificio alejado de las consideraciones bioclimáticas en su construcción, a lo que se une la necesidad de colocar vinilos oscuros en todas las superficies acristaladas que no estaban previstas en el proyecto. Esto unido a excesivas necesidades energéticas de este nuevo edificio, ha llevado a muchos expertor a criticar la valoración de la arquitectura y el modelo constructivo por encima de los elementos materiales.

De esta manera, un edificio abierto al exterior, fundamentado en los principios de la transparencia y el vidrio, vuelve a poner en juicio los principios universalistas y tipológicos de la arquitectura del Movimiento Moderno, o mejor dicho, la interpretación personal de estos principios a la hora de desarrollar este tipo de edificación en ciudades del Sur: el sobrecalentamiento del muro-cortina acristalado expuesto al sol requiere un alto gasto de aire acondicionado.

El sistema de Trigeneración de ahorro energético se ha puesto en marcha en el año 2011, y con ello la voluntad de eficacia energética a la que aspira este edificio. De nuevo se abre el cisma entre los principios estéticos y los funcionales a la hora del desarrollo de proyectos sostenibles.

JOVC – FMF – IHS